domingo, 5 de junio de 2011

Alrededor de las restauraciones

Alrededor de las restauracionesCuando uno lleva más de 30 años y más 200 carretes restaurados en esta vida de coleccionista tiene sin duda un grado de veterania,que no ha de representar en ningún caso ningún reconocimiento público,ni honores,ni medallas inmerecidas,ni mucho menos calificaciones totalmente fuera de lugar.
Únicamente puede uno (quizás) hablar (que no pontificar),escribir en otros casos sobre este apasionante y muchas veces incomprendido “mundillo” de la restauración.
Ya en mis años mozos se decia en “la mili” que la veterania era un grado y evidentemente es cierto en todos los estadios de la vida.Es sin duda la escuela de la vida,la mejor que hay,pero que se cobra las lecciones muy caras.
Quizás por ello pueda comentar con toda tranquilidad aquello que voy apreciando en esta ya larga singladura de la cual no deseo ver el fin.
Llegado a este punto puedo pues tener una muy amplia visión de lo costoso que puede resultar en muchas ocasiones la restauración de un carrete de pesca.Porqué no se trata ya de que cada carrete de una marca determinada sea idéntico a otro como él,no,se trata sin duda,de que cada carrete de pesca,és único en su género a la hora de su restaurado.Puede parecer inverosímil,pero no lo és.Repito:”cada carrete és único a la hora de su restauración”.Se que más de uno se preguntará,¿puede ser cierto cuanto aquí se expresa?,pues si,es cierto,y bien lo saben aquellos que como yo andan por estos lares realizando tareas de restauración que suelen terminar de 4 modos,a saber:1 Bien,2 Regular,3 Mal y 4 No ternimar nunca.
Es tan extenso y amplio el tema que en diversos escritos trataré de relatar cuanto expongo para dar un rayo de luz sobre tales afirmaciones.Escribiré sobre los cuatro tipos de restauración que he expuesto anteriormente.Pero dadas las circunstancias quiero terminar hoy mi articulo con la primera recomendación.Voy a recomendaros a todos,futuros y ya veteranos restauradores,que en priemr lugar tengais en cuenta,que precisareís para realizar un restaurado en condiciones,tres puntales básicos para ello.En primer lugar,nuestro “rincón de restaurado”.Deberá ser un lugar donde podamos acceder y donde en un momento determinado pueda quedar el producto de nuestro esfuerzo,desarmado con la garantia de que ninguna de sus piezas va a desaparecer por un indeseado accidente.Como si de peligrosos medicamentos se tratara,uno deberá dejar fuera del alcance de la mano el fruto de nuestro trabajo a colectivos tan vulnerables como son:niños y ancianos,básicamente;como todo lo que le rodea,un indeseado accidente doméstico,por descuido,puede ser fatal,y la afición és la afición pero la seguridad de los nuestros y muy especialmente de los más pequeños és esencial.En segundo lugar deberá estar debidamente iluminado y muy importante,dotado de un sin fin de herramientas que aunque pueda parecer imposible son imprescindibles en muchos casos cuando se desea realizar una restauración de la que uno se sienta satisfecho.Y finalmente deberá estar provisto del mayor número de recambios posible.No és válido aquello de que una manecilla sirve para todo carrete,eso jamás:Si és posible hallar en muchas ocasiones un carrete identico al que tenemos para restaurar pero al que le faltan un monton de piezas,pero que quizás dispone de aquellas que a nosotros tanto falta nos hace para ver hecho realidad nuestro sueño:tener finalmente restaurado nuestro viejo y estimado carrete de pesca.
Por complicado que sea,recomiendo usar siempre repuestos originales,nuevos o usados,solo salvo en casos muy excepcionales,e únicamente en piezas internas,se podria llegar a utilizar,réplicas o piezas realizadas de un modo artesanal para la ocasión.Este último caso solo tendrá la satisfacción personal de ver funcionar nuevamente el carrete,medianamente bien o mal,pero os aseguro que vuestro carrete habrá perdido todo su valor de coleccionismo ante cualquier experto coleccionista.Recomiendo paciencia,dia llega que al fin con piezas originales,nuevas o usadas (repito) vereis vuestra pieza rodar casi como el primer dia de su puesta en escena.



Texto y fotografias: Enric Padrós arxipesca